Páginas que tengo en inetrnet

miércoles, 23 de octubre de 2013

DEFINICIÓN DE diversidad-El docente frente a la diversidad y las diferencias

DEFINICIÓN DE diversidad
La diversidad (del latín diversitas) es una noción que hace referencia a la diferencia, la variedad, la abundancia de cosas distintas o la desemejanza.
La diversidad cultural refiere a la convivencia e interacción entre distintas culturas. La existencia de múltiples culturas está considerada como un activo importante de la humanidad ya que contribuye al conocimiento.
Diversidad funcional es un término alternativo al de discapacidad que ha comenzado a utilizarse en España y ahora en Venezuela, por iniciativa de los propios afectados. El término fue propuesto en el Foro de Vida Independiente, en enero de 2005, y pretende sustituir a otros cuya semántica puede considerarse peyorativa, tales como "discapacidad" o "minusvalía". Se propone un cambio hacia una terminología no negativa, no rehabilitadora, sobre la diversidad funcional. Con el término diversidad funcional se propone una nueva visión que no es negativa, que no implica enfermedad, deficiencia, parálisis, retraso, etc. con independencia del origen patológico, genético o traumático de la diversidad en cuestión. No obstante, no se niega el hecho de que se habla de personas que son diferentes a la norma estadística y que por ello realizan algunas de sus funciones de manera diferente a la media de la población. Para las personas con diversidad funcional, el modelo médico rehabilitador considera la inclusión en la sociedad de este colectivo únicamente a través del trabajo (Centros Especiales de Empleo) o el estudio (Educación Especial), dictando desde fuera lo que debe hacer la persona. Bajo la perspectiva ideológica de la Diversidad Funcional se considera esencial apoyar la independencia en todos los ámbitos de la vida cotidiana: educación, trabajo, edificación, transporte, comunicación, información, ocio, etc. dando a cada persona las herramientas que precise para desarrollarse en esos ámbitos, de manera que tome el control de su propia vida.
Las diferencias individuales
Sabemos, sin necesidad de hacer profundas y complejas reflexiones, que todos y cada uno de nosotros somos portadores de una historia y personalidad que nos hace únicos, especiales. No hay dos personas iguales, nuestras biografías difieren radicalmente a pesar de estar inmersos en una misma sociedad regida por los mismos valores y objetivos.
Las diferencias en un salón de clases constituyen hoy y siempre una realidad cotidiana. Trabajamos día a día con un grupo formado por alumnos de la misma edad, con condiciones sociales semejantes, con historial académico proveniente de la misma institución o bien de otras similares, y sin embargo identificamos en ellos diferencias radicales, diferencias relacionadas con su personalidad, sus conocimientos previos, el sexo, el carácter.
  • Diferencias relacionadas con la experiencia previa
Muchos de los niños que hoy en día van a al jardín de niños pasarán a primero de primaria luego de haber cursado tres o hasta cuatro años de educación preescolar. Sin embargo, actualmente todavía hay muchos niños que tienen sólo un año de educación preescolar, sin contar aquellos que ni siquiera tienen la oportunidad de asistir. 
Al hablar de diferencias relacionadas con la experiencia previa, no solo se hace referencia a sí un niño recibió o no algún tipo de instrucción, sino también a la calidad de la instrucción recibida, por ejemplo: en muchas escuelas que están lejos de centros urbanos se manejan aún con un solo maestro/a para todos los grupos de primaria, lo que puede demeritar la calidad. También interviene la ubicación geográfica, ya que no es lo mismo las vivencias y oportunidades de un niño en una zona rural a las experimentadas por un niño proveniente de una zona urbana. Además de la diferencias de personalidad, experiencia previa y género, Guild y Garger (1998) también sugieren tomar en cuenta las diferencias culturales. En este mundo globalizado, en algunos colegios no resulta extraño que en un salón de clases haya alumnos de diversas nacionalidades, cada uno con sus rasgos culturales particulares. No se debe pedir a estos alumnos que dejen a un lado su cultura para integrarse al grupo. Los valores culturales y las expectativas de aprendizaje están directamente relacionadas con el éxito académico, social y emocional del alumno en el ámbito escolar. Es responsabilidad del maestro comprender estas diferencias culturales y propiciar un ambiente que acoja a todos los perfiles de alumnos.
El docente frente a la diversidad y las diferencias
Cada niño que ingresa a la escuela presenta características bio-psico-sociales diferentes, originadas en diferencias familiares, económicas, culturales y sociogeográficas. Allí encuentra un sistema de enseñanza bastante uniforme, a cargo de maestros que han sido formados para estar al frente de un grupo de niños con determinadas características stándares. Este contraste entre la realidad de los alumnos y la práctica docente provoca desajustes, problemas que complejizan el escenario de la acción educativa. En tal sentido, nos parece pertinente reflexionar y conceptualizar algunos de estos planteamientos, tomando como base la posibilidad de conocer y reconocer la heterogeneidad de los grupos de alumnos, reconceptualizando de esta manera las prácticas docentes. Es importante precisar que todos los alumnos, tengan o no discapacidad, son diferentes, cada uno con sus propias fortalezas y necesidades. Además, se debe nuevamente resaltar que al interior de una misma discapacidad existen grandes diferencias individuales, así se comparta la misma condición biológica. Es posible que los maestros regulares nos sintamos tan nerviosos y ansiosos sobre el regreso de alumnos con capacidades diferentes a nuestro salón y a nuestras escuelas que erróneamente asumamos que esos niños están deseosos de ser incluidos. La siguiente carta ayuda a explicar la ansiedad a través de los ojos de una niña que ha estado escolarizada en salones de educación especial. El éxito de la integración no puede ser impuesto por una Ley. Para que la Integración escolar sea una realidad uno de los componentes más poderosos es la actitudinal. El modo en que el profesorado responde es fundamental para transformar la educación. Tener una actitud abierta hacia la diversidad es una de las claves para el nuevo milenio en el campo educativo. Son numerosas las investigaciones que han tratado el tema de las actitudes del profesorado hacia la integración del alumnado con deficiencias y nuestro interés se centra en abordar este tema desde una perspectiva socioeducativa, que permita analizar y reflexionar sobre cuáles son las actitudes hacia las N.E.E. de los docentes de Infantil y de Primaria. El docente hace un aporte a partir de su experiencia y saber pedagógico; sin embargo, requiere ser apoyado con herramientas y estrategias adecuadas, que le permitan atender una población diversa dentro del aula.  Consideramos que para que la escuela pueda responder a la heterogeneidad de la población que educa, más cuando personas con discapacidades diversas van a ingresar a ella, se deben dar a los maestros herramientas, criterios, estrategias y capacitación acordes a esta nueva escuela que se pretende crear a partir de nuevos paradigmas y leyes educativas. Maestro itinerario y servicios relacionados
En un programa inclusivo el maestro de educación especial y los profesionales en servicios relacionados (terapista de lenguaje, terapista ocupacional, terapista físico entre otros): Experimentan en el mayor cambio en cuanto a roles y funciones. Experimentan el cambio de trabajar en un "salón de educación especial" a trabajar en un salón donde la mayoría de los niños son típicos. El maestro de educación especial no tiene "su propio salón" sino que ahora tiene un rol de colaborador y consultor en el aula regular. Los profesionales en servicios relacionados ya no proporcionan servicios directos con el niño sino que deben proporcionar cualquier combinación como entrenamiento de personal, consultor, monitor etc.
Los roles del profesor no son solamente numerosos y variados, sino que el docente debe cambiar de un rol a otro en forma espontánea., fluida y profesional. En mi opinión, la inclusión de estudiantes con discapacidades cognitivas en una clase regular no crea nuevos roles para el profesor. Requiere, sin embargo, afilar las habilidades existentes y reevaluar prácticas y actitudes tradicionales. Enseñar a una clase integrada requiere dedicación personal y profesional. No es suficiente que el personal directivo del plantel apoye la filosofía de la integración escolar. El éxito o fracaso del proceso depende de las creencias y prácticas del profesor en el salón. De hecho, el principal indicador que caracteriza un proceso de integración con posibilidades de éxito es el grado de convencimiento que el profesor demuestre en torno a este modelo educativo. El profesor debe creer que el profesor demuestre en torno a este modelo educativo. El profesor debe creer que el colegio es el ambiente más natural para que todos los estudiantes crezcan y aprendan unos de otros y también de los adultos. Las necesidades educativas especiales de un niño pueden ir más allá de la experiencia del profesor. Por lo tanto tendremos que hacer a un lado algunos de nuestros métodos tradicionales y buscar técnicas innovadoras. Probablemente descubriremos que todos nuestros estudiantes se beneficiarán con estos cambios en nuestra práctica pedagógica... Para muchos niños con necesidades especiales, los objetivos académicos regulares no son apropiados. Los programas necesitan ser modificados, poniendo mayor énfasis en ayudar a los estudiantes a desarrollarse como miembros funcionales y activos de su comunidad. Los profesores deben tener una visión general de los resultados que se desean obtener y evitar limitarse a una lista de objetivos preestablecidos para determinado nivel o grado de escolaridad. Lo que el profesor planifique para el estudiante deberá encajar con la visión que el profesor, los padres, y en muchos casos el estudiante mismo, tengan para su futuro. Apoyo y colaboración. Debido a que los profesores con frecuencia consideran el tener un niño especial como una gran responsabilidad, es aconsejable promover el espíritu de colaboración.
El docente de educación inicial un estratega integral
En Realidad Todos los Docentes Que trabajamos en el Nivel Básico somos Estrategas integrales ya Que el Propósito de la Educación es Formar Alumnos íntegros, es Decir, Que Reciban de Igual Manera Conocimientos COMO Formación Humana, CAPACES de Alumnos en Práctica PONER SUS Conocimientos Pero basados ​​en Valores y Una Actitud Positiva, Lo Que pasa es Que en la Educación Inicial les corresponde dar inicio con la Educación Integral. La Educación inicial, en este continuo humano, tiene la gran tarea de iniciar los procesos en el SABER, a través del desarrollo de la inteligencia, el CONVIVIR, a través del afecto y, el HACER, a través del juego. , la educación inicial debe estar conformada por un contingente de maestras y maestros ESTRATEGAS  que lejos de llenar de contenidos a los niños y las niñas, PROPICIEN el desarrollo de la inteligencia sacando lo mejor que tienen. Bombardear al niño con contenidos no sólo no desarrolla la inteligencia sino que la mutila, entrenando a nuestros niños a responder a exigencias sin comprenderlas y adaptándose a circunstancias que se escapan de su edad. el docente de Preescolar es el encargado de crear, proveer y mediar situaciones donde los niños adquieren aprendizajes a través del juego. los docentes requieren de un entrenamiento pedagógico, que les permita actuar más como estrategas, directores o mediadores del aprendizaje que como transmisores de información" (Ruiz, 1998, p. 17).
El maestro es el líder y promotor social que actúa en función de la nación, por tanto tiene la ardua tarea de renovar el pensamiento, planificar el futuro del educando y de la sociedad, razón por la que debe entregar lo mejor de su espiritualidad, desenvolviéndose como gestor del movimiento de transformación educacional y nacional. Debe ejercer, por lo consiguiente, una acción revolucionaria que caldee los espíritus, rompa la indiferencia y tenga un amanecer magnifico, concretar la libertad del hombre, lo que quiere decir, ajustar el proceso educativo a Revista ORBIS / Ciencias Humanas Daisy Fuenmayor, Dulce Guerra Como el Líder de la Comunidad la ideología del Estado venezolano, la cual debe surgir de los ciudadanos, los hechos y las necesidades de la patria (p. 232
Desde esa perspectiva, el maestro es constructor de futuro social, viabilizador de la convivencia, quien debe proporcionar la participación social de las familias en las comunidades. Es un líder. El maestro de educación inicial de Venezuela “es un docente que se le considera mediador de experiencias de aprendizajes, quien centra su labor en la realización de procesos, mediante el cual deberá generar interacción social” (Ministerio de Educación y Deportes, 2003), para producir conocimientos. Actúa en dos ámbitos integrados: la escuela y ambiente socio-cultural (integrado por la familia y la comunidad). Esa concepción del educador, está vinculada al concepto de desarrollo, zona de desarrollo próximo, formulada por Vigotsky (1973), el cual permite estimar las diferencias entre el desarrollo psicointelectivo y los procesos de desarrollo realizado. El maestro de educación inicial, en esta perspectiva, enfatiza la comprensión y significación, como factores fundamentales de aprendizaje, cuyo trabajo laboral debe estar orientado a superar el memorismo, para lograr aprendizajes significativos, orientando el que los niños aprendan a conocer, hacer, convivir. Aunado a lo antes explicado, Ramírez y Jáuregui (2000), expresaron que el docente del siglo XXI, debe tener un perfil conformado por las siguientes competencias:
1. Transformador de la cultura, al lograr una identidad como educador donde el enfoque de su formación no sólo sea instruccionista, sino que se caracterice por una dimensión político-pedagógica comunitaria. 2. Comunitario, porque debe conocer las características socioculturales de los educandos y del contexto particular en el que se encuentra laborando (p.18). El liderazgo del maestro de educación inicial, de acuerdo con Freites (2004), no se está logrando porque se sigue instaurando en diversas naciones, prácticas tradicionales en la conducción de los aprendizajes de los niños, desaprovechándose las ventajas que le ofrece la tecnología educativa; en tanto que Ramírez (2005), reportó: el maestro de educación inicial, no está desarrollando el liderazgo en las Revista ORBIS comunidades adyacentes a los centros educativos y tampoco su actuación laboral se circunscribe a las formas de aprender del niño y necesidades del entorno familiar.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

POR FAVOR REALIZA UN COMENTARIO SERIO