Chiguará el pueblo que navega

	Chiguará el pueblo que navega
	El Sol mañanero, el frío templado y las calles empedradas desnudan la arquitectura colonial que data de dos siglos atrás, el pueblo que navega constantemente con el devenir del tiempo y las manos encallecidas de sus pobladores, los surcos profundos en la piel del hombre y la mujer que trabaja la tierra, nos es presentado a viva voz por uno de sus pobladores, Carlos Manuel Fernández.
	Vive.gob.ve (BB)
	23 de enero de 2006
	Vive: ¿Cuándo se fundó Chiguará? Carlos Fernández (CF): “Se fundó un 22 de Diciembre de 1657, según consta en el acta de nacimiento, por el Capitán Juan Francisco Fernández y Rojas , él nunca vino a la América, tenía nueve años cuando fundó a Chiguará, porque quién fundó a Chiguará fue su padre, perseguido de la inquisición y le dijeron o el Calabozo o la América, él escogió la América. Como estaba perseguido pierde los privilegios, pero consigue privilegios para su hijo, y le dan una licencia para que con el nombre de su hijo pueda fundar...allí nace Chiguará.” Vive: ¿Cuáles son las familias tradicionales del pueblo que usted recuerda? CF: “De aquí son los Rojas, los Ramírez... Chiguará ha sido poblado por épocas, por ejemplo: los Dugartes son venidos de Trujillo a principios del siglo pasado; de esa misma ola están los Mateos, los Angaritas y Sandias se vinieron de Colombia, vinieron a principios de siglo.” Vive: ¿Qué recuerdas de Chiguará durante tu infancia? CF: “La luz mala, las calles de piedra , la gente con sus costumbres pueblerinas, era mucho más creyente que ahora, ahora la gente es más crítica.” Vive: ¿Chigurá ha cambiado? CF: “Sí ha cambiado, ha cambiado por olas, la historia la ha traído en olas, hay períodos que han marcado la evolución del Chiguarero, de Chigurá, a pesar de los cambios de forma y de producción ha conservado su idiosincrasia muy marcada. Por ejemplo decirle no a todo, como dijo Cleiver Ramírez, el pueblo no, tu llegas nos planteas algo es no... Jaaaa...., o me lo argumentas bien argumenta´o o es no, eso tiene el Chiguareño.” “Este pueblo fue construido, fue hecho, fue poblado por renegados, que no aceptan de buenas a primeras. Chiguará precolombino, fue un pueblo de renegados, geográficamente estamos en la punta, rodeada por farayones, ríos: el Chamas y el Mocotiés, eje del valle de Mérida.” Vive: ¿Cuáles son las leyendas que recuerdas? CF: “¿Las leyendas del Pueblo?... es la barra de oro que baja desde Morón hasta el Estanque que sale desde arriba hasta allá abajo, es de origen indígena, después de un tiempo los geólogos se dieron cuenta, que no es de oro, sino de agua y mueve al pueblo. El pueblo navega encima de una veta de agua que se esta moviendo contantemente, que lo lleva bajando...¡ cada cinco años el pueblo baja tres centímetros.! Hubo un cura de 1700 que lo corrieron, no se recuerda el porqué, él dió una maldición y dijo: el Tanque se estancará, Chiguará se bajará y Lagunilla Chillará, los geólogos dicen que por la falla.” Vive: ¿Aquí había un asentamiento indígena, porque el nombre es como indígena? CF: “El nombre es indígena porque aquí estaban los indios Chiguará, o Chigurá el sitio, se traduce el pueblo que busca el agua, en la lengua de Jajies, diferentes a los Mocotiés que vienen de los pueblos del Sur los jiros, su confluencia era aquí en el Chiguará.” Vive: ¿Qué sueñas para Chiguará? CF: “Formar un sistema de hacer las cosas, no me gusta el término trabajar, no queremos que trabajemos, sino hacer cosas colectivamente, que produzcamos en felicidad, armonía lúdicamente. Chiguará tiene posibilidades si logra entender que hay potencialidades geográficas, en clima, en creatividad, en concepción del mundo distinto, nosotros estamos aferrados a nuestra ignorancia y nos cuesta comprender las cosas. Tengo pensamientos profundos hacia los cultivos de alta tecnología, en este clima se dan excelentemente, hacia allá voy dirigiendo nuestras líneas personales y comunitarias, nosotros tenemos aquí el conocimiento, nuestro proyecto son los cultivos en invernaderos, nuestras fuerzas intelectuales y prácticas van hacia allá... el cambio para una nueva sociedad comienza con lo que pensamos, hacemos y sentimos...” ¡El verdero revolucionario es autocríco!